La provincia mantiene su ritmo de generación de empleo acercándose al récord histórico firmado en julio del pasado año, en plena temporada alta
Málaga, 6 de mayo de 2024
El empleo ha vuelto a marcar datos positivos para la provincia de Málaga, por segundo mes consecutivo, alcanzando en abril los 710.600 trabajadores de alta en la Seguridad Social. Este dato se acerca a las históricas cotas registradas para el empleo en Málaga, correspondientes a julio de 2023, en plena temporada alta. Así, el paro se redujo en abril en 4.166 personas, cifrado en 126.982 parados. De esta manera, la provincia continúa manteniéndose en los niveles de paro más bajos desde 2008 y, en comparativa interanual, cuenta con 6.428 desempleados menos que en abril de 2023. El sector servicios continúa canalizando la mayor parte de las contrataciones, reduciendo el paro en más de 3.000 trabajadores, a distancia de la construcción (376), la agricultura (97) y la industria (96).
La vicepresidenta ejecutiva y secretaria general de CEM, Natalia Sánchez, valora estos datos destacando “la capacidad de nuestra provincia de mantener su crecimiento constante, generando actividad económica y empleo y marcando, ya en abril, niveles propios de la temporada alta” por lo que, señala, “afrontamos una campaña turística con buenas perspectivas y, de mantener este ritmo, superaremos pronto la cota más alta de trabajadores en activo alcanzada en la provincia de Málaga”. Valora, además “la estabilidad del empleo generado, manteniendo la creación de puestos de trabajo indefinidos en torno al 50% de las contrataciones”.
Así mismo, Natalia Sánchez subraya que “desde las empresas se apuesta por continuar generando empleo, de forma sólida y estable, con el objetivo de traspasar ese récord histórico y mantener la constante reducción del paro, a niveles ya anteriores de 2008”. Eso sí, recalca que “para ello, para que las empresas puedan crecer y alcanzar esas metas necesitan certidumbre y estabilidad, especialmente, seguridad jurídica y un ecosistema que les permita ganar en competitividad y poder desarrollar una planificación de crecimiento a medio y largo plazo”. Un contexto que, afirma “no está garantizado a día de hoy desde el ámbito nacional, debido a su situación política y social, marcada por la constante tensión y la falta de apoyo a las empresas”.
En este sentido, la vicepresidenta ejecutiva de CEM recalca el hecho de que “contamos con un tejido productivo formado en más de un 99% por pymes. Y 4 de cada 10 de nuestras empresas, de hecho, son micropymes. Por tanto, necesitamos desarrollar políticas que fomenten su crecimiento, ganando en dimensión, en tamaño y en competitividad, reduciendo la presión fiscal y compensando el constante aumento de los costes salariales para poder generar más empleo aún y, en el caso de la provincia de Málaga, asimilar el constante el aumento de nuestra población activa”.