En la mañana de hoy, martes 5 de marzo, ha tenido lugar la celebración del encuentro “Relevo generacional en la empresa familiar: Las claves para acometerlo con éxito desde el punto de vista jurídico-tributario y aspectos prácticos’, organizado por el Consejo de la Empresa Familiar de CEA en el marco del programa CEA +empresas, con la colaboración de la Consejería de Economía, Conocimiento, Empresas y Universidad de la Junta de Andalucía.
Han participado en el acto María Paz Hurtado Cabrera, Presidenta del Consejo de la Empresa Familiar de CEA; Luis Granda López, Socio Director de GRANDA, Estudio de Planificación del Empresario Familiar; Inés Juste Bellosillo, Presidenta de Grupo Juste, y Belén Fernández Gómez, CEO del Grupo Embasur.
En el transcurso de su intervención, María Paz Hurtado ha destacado que las empresas familiares constituyen la columna vertebral de la economía española, andaluza y malagueña, añadiendo que, cuando hablamos de empresa familiar, nos referimos al 90% del tejido empresarial de Andalucía, que realiza una contribución al PIB y al empleo regional estimada en torno al 80%.
Pero sobre todo, ha indicado, más allá de las estadísticas, la alta vinculación de las empresas familiares con el territorio y con los valores de la sociedad en la que surgen y en la que se integran, acentúan aún más su indudable protagonismo en las actividades económicas y en el desarrollo de la sociedad.
Se trata, ha recordado la Presidenta del Consejo de la Empresa Familiar de CEA, de un tejido productivo familiar del que tenemos importantes referentes por toda Andalucía, de dilatada trayectoria y buen posicionamiento en los mercados globales, pero en el que también es muy relevante el papel que juegan las empresas familiares de menor dimensión y más jóvenes.
Por ello, ha indicado María Paz Hurtado, un factor clave para el impulso del desarrollo económico y social de Andalucía se encuentra en los procesos emprendidos por estas pequeñas y medianas empresas familiares, sin olvidar que, para mejorar su competitividad, estas empresas afrontan las vicisitudes propias de todo proceso de crecimiento y expansión empresarial, con los matices propios que imprimen las características inherentes a estas empresas, como son los equilibrios en las relaciones que se dan entre la familia empresaria y el día a día del negocio y su dirección estratégica.
Por su parte, Luis Granda López se ha centrado en la importancia de la gestión de las emociones para favorecer el necesario relevo generacional, actuando desde edades tempranas para implicar a los futuros gestores de la empresa.
Inés Juste Bellosillo, en su intervención, ha querido destacar lo productivo de compartir experiencias y conocimientos a través del asociacionismo empresarial.
Por último, Belén Fernández Gómez ha insistido en la necesidad de integrar las ideas y las diferentes experiencias de cada una de las generaciones de la familia y el momento que les toca vivir, en la gestión de la compañía.