Tras la difusión, en el día de hoy, 2 de octubre, de los datos del Servicio Andaluz de Empleo (SAE) referidos a las cifras de desempleo, la Confederación de Empresarios de Málaga (CEM), considera que deben analizarse los datos con prudencia, ya que, aunque arrojan una subida del desempleo, también es cierto que se trata del menor incremento en el mes de septiembre desde 2007.
Según el SAE, el número actual de personas en paro en la provincia de Málaga es de 196.150. Se registra así un incremento de 2.509 personas respecto al mes anterior. Esta subida se debe sobre todo al sector Servicios (+3.613 parados).
A pesar del incremento descrito, en la perspectiva interanual la diferencia entre septiembre de 2013 y el mismo periodo del año anterior es de 831 desempleados menos, dato relevante si se tiene en cuenta que es la primera ruptura de la serie histórica de subidas que se vienen produciendo en los años de crisis.
En el conjunto de Andalucía aumenta también el número de desempleados (2.973). Respecto al ámbito nacional, se registran este mes 25.572 personas más en situación de desempleo.
Analizando tanto el contexto temporal como el geográfico, se puede concluir que los datos obtenidos en la provincia de Málaga son coherentes con las últimas semanas de la temporada turística, si bien debemos esperar al comportamiento del empleo en este último trimestre de 2013 para comprobar si finalmente se produce un cambio de tendencia en la dinámica del desempleo. A ello deberían contribuir las inversiones contempladas en los Presupuestos Generales del Estado que hemos conocido esta semana. A este respecto, CEM recuerda la necesidad de priorizar partidas en Málaga tan relevantes como las destinadas a finalizar el saneamiento integral de la Costa del Sol o infraestructuras largamente demandadas en la provincia y no contempladas en los mencionados Presupuestos, que redundarían en una mejora de los productos y servicios ofertados, así como de la generación de empleo.
Desde CEM, por último, recordamos una vez más la relevancia de atender, desde todos los órdenes implicados, a la priorización de las políticas e iniciativas orientadas al apoyo de las pymes –tales como la revisión de las cotizaciones sociales, en cuyos márgenes se prevé de nuevo un incremento para 2014, y en la carga impositiva que soportan nuestras empresas, que también está previsto que crezca, a la luz de los mencionados Presupuestos Generales-, al estímulo de la creación de empresas y el emprendimiento y a la atención especializada para aquellos colectivos más vulnerables ante el desempleo.